La Seremi de Salud del Biobío comenzó formalmente con las fiscalizaciones a productos del mar de cara a Semana Santa, con el objetivo de garantizar la inocuidad de los alimentos y así disminuir los brotes de enfermedades o intoxicaciones.
Al respecto, el seremi de Salud del Biobío, Héctor Muñoz, recalcó que “las fiscalizaciones se han intensificado en 2019 en toda la Unidad Alimentaria, producto de eso hemos tenido buenos resultados, por ejemplo, la hepatitis A ha bajado en un 69%, las enfermedades de transmisión también han bajado, y hemos aumentado las fiscalización, y en varios locales hemos tenido disminución de sumarios. Eso significa que cuando la Seremi de Salud fiscaliza más activamente, la consecuencia, el resultado, es menor riesgo a la salud de la población”.
Junto a esto, explicó que “durante estas fechas realizamos control de transporte de alimentos, donde verificamos la temperatura, procedencia, características organolépticas de los productos y las respectivas autorizaciones sanitarias; además de control de venta minorista, donde se verifican las condiciones sanitarias en la venta, manipulación, mantención de sistema de frío, eviscerado de pescados, entre otros aspectos”.
En este sentido, el encargado regional de la Unidad de Seguridad Alimentaria, Lino Alarcón, detalló que “primero nos fijamos que los locales cuenten con autorización; segundo, que los productos que se vendan, tanto pescados como mariscos se vendan bajo temperatura de refrigeración, y aquellos que están congelados mantengan la temperatura de congelación a menos de 18 grados Celsius. También además de la cadena de frío, verificar las características organolépticas de los pescados y mariscos, ya que con ciertas características podemos darnos cuenta cuando estos productos están frescos”.
Respecto a las fiscalizaciones durante el año pasado, la autoridad sanitaria informó que se realizaron 940 revisiones, 896 en venta minorista y 44 a transporte de productos del mar. Del total, 460 se registraron en la Provincia de Concepción, 138 en Biobío, 64 en Arauco y 278 en la entonces Provincia de Ñuble.
Aquel proceso de inspección dio origen a 37 sumarios sanitarios, cuyas causales tuvieron relación con deficiencias sanitarias (57%), no contar con autorización sanitaria (20%), alimentos alterados (15%) y pérdida de cadena de frío (8%). Mientras que la inspección a vehículos concluyó con tres sumarios, por no contar con autorización sanitaria para transportar alimentos que requieren frío.
Además, en 2018 se decomisaron 2 mil 548 kilos de productos del mar durante Semana Santa: 178,5 kilos de pescado y 1.830 de mariscos.
