FUENTE: biobiochile.cl |
Héctor
Garcés González, ex piloto privado y testigo del accidente en Tirúa, el que
terminó con cuatro personas fallecidas el pasado 8 de enero, contradijo las
declaraciones de Eugenio Moya, familiar de una de las víctimas.
En entrevista
con Podría Ser Peor, el piloto relató que “cuando estábamos esperando que
llegara el avión, que había despegado poco antes, Boris Schultz pidió que le
cargaran 90 litros de combustible para ir a la isla y volver, y eso hizo. Se le
cargaron y el tomó el cabezal como correspondía, de sur a norte, y despegó en
dirección a la isla”.
Sobre
Schultz, persona a cargo del vuelo, indicó que “tenía pocas ganas de volar
porque se iba a encontrar con su polola”, quien estaba en el lugar esperando el
aterrizaje. Garcés agregó que “ella me pregunta como estaban y yo escuché a una
de las personas del avión con algo de signos vitales pero en agonía. Fue muy
duro, no le contesté nada y le pedí que no se acercara, porque estaban
fallecidos”.
En
respuesta los cuestionamientos, el piloto señaló que “don Eugenio Moya dice que
Juan Carlos (dueño del avión accidentado) le dio la orden de que se metiera con
mal tiempo en Tirúa y no, los dos aviones venían hacia Tirúa y cuando ocurre
esto le dicen que siga el vuelo a Cañete, por razones obvias”.