Dando los últimos toques de color, emoción y expresividad a sus creaciones, los integrantes del Taller de Máscaras Teatrales, culminaron esta mañana, el proceso que desde octubre del año recién pasado hasta hoy, dio vida a la sesión de Arte-Terapia que la Estrategia de Desarrollo Local Inclusivo, EDLI, desde el área de rehabilitación con base comunitaria, produjo y coordinó a través de la fonoaudióloga Claudia Manríquez, en dependencias del PADIS de Tirúa.
La instancia, entregada técnicamente por la actriz y profesora plástica Loreto Ortiz, buscó encontrar en esta expresión artística, “una herramienta de sanación e inclusión diferente para las personas en situación de discapacidad”, según la profesional de la salud, permitiendo además, generar lazos y espacios de encuentro inéditos para sus integrantes.
La señora María Teresa Macías, quien desde Manqueche asistió a todas las sesiones del taller, lo catalogó como “muy constructivo, porque vivo muy sola y anhelo venir para sentirme acompañada, además que la unión que se gestó con las compañeras y compañeros, más lo cariñosa que es la profesora, me hace sentir muy acogida. Y más encima, tuve la oportunidad de aprender este hermoso arte”, enfatizó. En tanto, Héctor Millahual, indicó que “me gustó compartir con los chiquillos la enseñanza que nos está dando la “profe”, porque es algo bonito, y que nunca se había dado la oportunidad de hacer y conocer”, concluyó.
Por su parte, Claudia Manríquez, señaló la importancia que como profesional del EDLI fue incorporar el arte como medio holístico de terapia, “que es un área poco conocida, pero que cada vez se está abriendo paso en esta dimensión, ya no solo como forma de expresión, sino como el arte nos permite sanar, aliviar e interactuar con otros, y ver la rehabilitación de una persona, no solamente desde el punto de vista físico, sino que también desde el punto de vista emocional, área que pocas veces se trabaja, pero que es muy necesaria también para estar saludable, aportando espacios de recreación, de expresión de sus propias necesidades, dolencias y enfermedades que los aquejan, reflejándolas en un trabajo tan hermoso como es una máscara”, concluyó.