Además
de los agricultores y habitantes de Cayucupil, serán alrededor de 500 personas
pertenecientes a diez comunidades indígenas establecidas en esta zona a quienes
se espera beneficiar con la reposición y aumento de obra del nuevo canal de
regadío de este fértil valle que aspira a convertirse en el eje del desarrollo
agroalimentario en la comuna de Cañete y la provincia de Arauco.
El
actual canal de regadío de Cayucupil fue terminado de construir por la
Dirección de Obras Hidráulicas (DOH) en 1988. Hoy, tras casi tres décadas de
funcionamiento, las autoridades del Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet
en conjunto con los habitantes de la zona han iniciado un proceso que busca convertir
a este valle en un potente enclave agroalimentario gracias al aumento de la
capacidad de riego al extender y mejorar
acueducto.
Por ello se realizó un nuevo
encuentro junto a los habitantes del sector, específicamente junto a los
representantes de las 10 comunidades indígenas que viven en el valle, para que
de esta manera se interioricen del proyecto y comiencen a dar los pasos
necesarios para obtener los beneficios que permite la distribución en extenso de agua para riego.
Héctor Baeza Curipán,
presidente de la comunidad indígena Luisa Antilí, quien además es también uno
de los principales representantes de la organización vecinal del valle de Cayucupil
explicó que “para nosotros es importante
este proyecto y así enfrentar los efectos de la sequía. También lo es para las
comunidades indígenas que represento, ya que al definir los derechos de agua se
puede postular a financiamiento a través de proyectos de desarrollo productivo”,
explicó el dirigente.
En los planes de la DOH, el
nuevo canal de regadío cubrirá gran parte de los más de 15 kilómetros de largo
que tiene este valle, redistribuyendo los derechos de agua constituidos para
que así todos los habitantes de la zona cuenten con el recurso hídrico,
especialmente los pequeños y medianos agricultores, así como para las
comunidades indígenas que viven en él.
Integrando la nutrida
delegación de Gobierno presente en la mencionada cita efectuada este martes en
la sede vecinal de Cayucupil, el director regional de Aguas, César Saavedra,
explicó que lo que hoy se está haciendo es un trabajo conjunto y participativo
para poder articular y traspasar los derechos de agua para quienes
originalmente estaba pensado el proyecto: “La
participación de toda la comunidad de Cayucupil ha sido bastante provechosa lo
que demuestra el interés de ellos en poder hacer uso y goce de esta tremenda
obra de infraestructura, tal cual fue pensada originalmente”, explicó
Saavedra.
En este sentido, la
participación de las comunidades indígenas cobra especial simbolismo dado que “nunca habían sido tomados en cuenta en
este tipo de proyectos”, dijo el director regional de Conadi, Carlos
Carvajal, quien además calificó como “histórico”
el proceso del cual también forma parte el organismo que representa.
Por su parte, el coordinador
regional de Recursos Hídricos, Ariel Durán, manifestó que “hacía falta escuchar la voz del mundo indígena respecto al acceso al
agua del canal de regadío, y en este sentido fortaleceremos sus organizaciones
para que se puedan constituir legalmente y así distribuir de manera eficiente
los derechos de agua que son administrados por la Dirección General de Aguas”.
ZONA
DE REZAGO
Una de las intervenciones más
importantes que contempla el proyecto del nuevo canal de regadío tiene que ver
de manera directa con la Zona de Rezago ya que fue este programa el que
recomendó su ejecución dada la alta rentabilidad económica-social de este
proyecto.
Jaime Lira, profesional del
programa, explicó que a través de recursos puestos a disposición por la Zona de
Rezago –política pública transversal que busca focalizar acciones y recursos en
iniciativas estructurales que sean capaces de aportar a la superación del
atraso socioeconómico que afecta a la provincia de Arauco-, el programa
aportará con un contundente financiamiento para los estudios y obras menores en
un plazo inferior a 40 meses (sin contar con toda la inversión sectorial que
contempla posteriormente la iniciativa y que bordea los tres mil millones de
pesos aproximadamente).
Para Humberto Toro, gobernador
de Arauco, “de esta manera se está
abordando parte importante de los problemas que tiene la provincia de Arauco;
la escasez hídrica y la falta de ejes de desarrollo que impiden el desarrollo
de nuestra gente, por lo que todas nuestras energías están puestas en lograr
que esta iniciativa logre transformar a un valle que tiene todas las
condiciones para ser el vergel agroalimentario que abastezca a la provincia, y
porque no, a la región”.
Se espera que gracias al nuevo
canal de regadío se suba de 600 a 1600 las hectáreas irrigadas gracias a los
1900 litros por segundo que es capaz de ofrecer este caudal, en una zona
considera por Indap y Sag como una de las mejores tierras agrícolas de la
provincia de Arauco y lugar donde viven unas tres mil personas pertenecientes a
la comuna de Cañete.